lunes, 25 de enero de 2016

Feria Regional de Hongos Silvestres en Cuajimoloyas, Oaxaca.



El julio antepasado (2014) tuve una experiencia maravillosa que vale la pena compartir. Mis primos y yo viajamos hacia la comunidad llamada San Antonio Coajimoloyas, ubicada en la Sierra Norte del estado de Oaxaca. El motivo de nuestra visita fue la 12va. Feria Regional de Hongos Silvestres, que año con año se lleva a cabo en este pueblo.

Como sabemos el estado de Oaxaca cuenta con una impresionante diversidad de plantas, animales, y hongos. Este último no es tan estudiado como los demás, sin embargo me parece una buena opción que las comunidades del estado se interesen en promover el conocimiento tradicional y científico acerca de los hongos.



Lo primero que hicimos al llegar fue pagar la cuota de recuperación, donde nos regalaron unas playeras alusivas a la feria. Posteriormente nos dividimos en grupos para empezar la recolecta guiada por una persona de la comunidad. Caminamos aproximadamente 7 horas dentro de la majestuosidad del bosque, con una temperatura fresca donde se percibía un olor a pino y humedad.





Conforme empezamos a caminar fuimos encontrando una gran diversidad de formas y colores de hongos. En un rato logramos llenar nuestra canasta.



El guía nos explicaba el nombre común y también la utilización que la comunidad le daba, si era comestible, medicinal o alucinógeno.



Se colectó con ayuda de una navaja para poder desprender al hongo del suelo.


Algunos de los hongos que encontramos fueron:

Amanita caesarea 

Amanita muscaria

Lactarius

Lycoperdon

Finalmente llegamos a un punto de encuentro en medio del bosque, donde todos los equipos nos reunimos para exponer la colecta que hicimos.



Al evento fueron invitados expertos en taxonomía de hongos que fueron poniendo nombres a los ejemplares.




Una vez terminado el evento, las mujeres de la comunidad nos ofrecieron una comida a base de hongos silvestres comestibles.

Finalmente regresamos al pueblo con una gran experiencia de convivir con otras personas que comparten el gusto por los hongos, con personas de la comunidad que nos enseñan de sus saberes y tradiciones y sobre todo con la naturaleza.





Es por eso que los invito a que asistan a esta hermosa experiencia en Cuajimoloyas, Oaxaca.

Les dejo algunos links en donde pueden encontrar más información del evento:


Pagina de Facebook

Un video acerca de los hongos: A ras de la tierra,
Video de los eventos que se hacen en el pueblo, como es la exposición y venta de comida de hongos.


Y algunos links de los hongos de México

http://www.inecc.gob.mx/descargas/con_eco/2010_sem_megadiverso_pres_05_ssierra.pdf

http://www.biodiversidad.gob.mx/especies/gran_familia/hongos/hongosCatalogo.html

domingo, 24 de enero de 2016

Dr. José Domingo Molina Galan †

El Dr. Molina en 2008, al recibir el Premio Estatal en Ciencia y Tecnología del Estado de México

Lamentablemente, les tengo que informar que falleció ayer mi colega, Dr. José Domingo Molina Galan, eminente maicero y fitomejorador, a los casi 84 años. Zacatecano de origen, fue uno de los primeros egresados del Colegio de Postgraduados; después de su maestría allí, obtuvo su doctorado en la Universidad de Carolina del Norte. Él creó varios maices que se usan ampliamente en la agricultura mexicana. Dirigió casi 100 tesis y fue autor y coautor en aproximadamente 120 artículos científicos; era Investigador Nacional nivel III y Emérito del CP desde hace muchos años, pero todavía trabajando hasta hace poco. Además, era un compañero querido y muy activo.

Dr. Molina con otro compañero maicero, Dr. Takeo Kato, haciendo guardia durante la huelga
de 3 meses en 2009, que tanto cambió el Colegio de Postgraduados.

viernes, 22 de enero de 2016

Mixiote con setas y xoconostle


Esta receta es muy fácil de hacer y tiene un cierto sabor acidito característico del xoconostle (del náhualt xococ: agrio y nochtl: tuna), así que si no te gusta mucho este sabor, puedes agregar el xoconostle en menor cantidad.

Ingredientes:
  • 2 dientes de ajo 
  • 1 Cebolla entera chica 
  • 2 Chiles de árbol 
  • 5 ramitas de epazote 
  • 4 Papas 
  • 7 Nopales medianos 
  • 3 Xoconostles 
  • 1 kg de Hongo setas o champiñones 
  • 1 chorrito de aceite vegetal 
  • Sal al gusto 
  • Cutícula de maguey o mixiote.



Procedimiento: 

Lavar y picar finamente todos los ingredientes cuidando que no queden trozos grandes.


Para limpiar el xoconostle, quitamos la parte exterior de la cáscara y nos quedamos con la parte de en medio. La tuna donde se encuentra las semillas la desechamos.


En una cacerola mezclamos todos los ingredientes empezando por el ajo, la cebolla, el chile, el epazote, el xoconostle, las papas, los nopales y las setas. Agregamos sal al gusto y un chorrito de aceite vegetal.




Antes de llevar al fuego podemos elegir si vamos a cocinar todos nuestro mixiote en una sola porción familiar o si lo queremos en porciones individuales.

En caso de elegir la primera opción tapamos nuestra olla con la cutícula de maguey o mixiote, para que suelte su sabor, y enseguida lo cubrimos con una tapa. Llevamos a la estufa y lo cocemos durante una hora a fuego medio.


Si elegimos cocinarlo en porciones individuales, partimos la cutícula en rectángulos de unos 15 cm de largo x el ancho de la hoja e hidratamos la cutícula para poder manejarla mejor.

En cada una de estas secciones, colocamos una porción de nuestros ingredientes y con un hilo sujetamos nuestro mixiote para que no se salga nuestro relleno. Cuando hayamos terminado nuestras porciones individuales las colocamos en una olla y los cocemos durante una hora a baño maría.

Una vez listo nuestro mixiote podemos acompañarlo con unas tortillas calientitas y unos frijolitos.



Provecho, espero te guste.

jueves, 21 de enero de 2016

¿La productividad agrícola es la clave para alimentar al mundo?

En el discurso oficial y académico sobre la producción agrícola y las posibilidades de alimentar poblaciones crecientes (aunque ya no tanto como antes), el rendimiento agrícola por hectarea juega un papel preponderante. Se dice que hay que elevarlo, por el medio que sea, porque si no, nos vamos a morir de hambre. Y lo que es peor, las estadísticas solo se enfocan en el cultivo principal, cuando hay a menudo otros productos en la misma superficie que también producen biomasa útil, como forraje, miel, quelite, etc.

La proporción entre calorías producidas y calorías que realmente se comen después de su conversión a carne, etc.

Pero aparte del hecho de las malas cuentas en tanto al rendimiento, este enfoque impide una visión más holística. Si lo consideramos bien, no es tan importante cuánto produce una hectárea, sino cuánto de esta producción realmente termina en nuestro plato.

De la cosecha original de una parcela, en el caso de plantas comestibles, tenemos que deducir los siguientes pasos, todos asociados con costos y mermas:

  • La venta (transporte, tiempo)
  • El transporte a algún mercado de mayoreo y las mermas en el camino, a veces entre países y continentes
  • El costo y las mermas del procesamiento (p.ej., elaboración de pan)
  • El costo y las mermas del comercio hasta la venta al consumidor
  • Lo que se tira o se echa a perder en la casa del consumidor (o la cocina del restaurante donde come)

En el caso de carne, existe una merma todavía mayor: solo una pequeña parte de las calorías de las plantas se convierte en carne. Por ejemplo, tienes que dar a comer a una vaca alrededor de 33 kg y a un puerco alrededor de 10 kg de granos, para que produzca 1 kg de carne. En huevos, esta "eficiencia de conversión" es aproximadamente 5:1 y en leche 1:0.4. Claro, necesitamos algo de proteína, y existen forajes para animales que no podemos comer nosotros, como pasto, zacate seco, desechos varios o esquilmos agrícolas. Además, existen regiones, como los grandes pastizales del mundo, que tienen vocación ganadera. Pero, una buena parte de la carne producida en forma comercial sí se basa en productos que básicamente son alimento humano.

Entonces, se puede mejorar el abastecimiento de muchas otras formas, que no necesariamente requieren mayor producción agrícola - haciendo más cortos y eficientes las vías de comercialización, por ejemplo. O mover el enfoque del alimento animal a esquilmos. O comer menos carne, que es una cuestión de costumbre, al fin.

Hoy les quiero invitar a leer una publicación que salió ya hace unos años, en 2013. Se llama "Redefining agricultural yields: from tonnes to people nourished per hectare" (Redefiniendo el rendimiento agrícola: de toneladas a personas alimentadas por hectárea). Trata una parte del tema: cuánta caloría se produce por hectárea en diferentes partes del mundo, que realmente termina en el sistema alimentario? No ve la parte del gasto energético y de tiempo del comercio, o lo que se pierde o se echa a perder, pero de todas maneras es interesante.

Tiene algunas figuras muy didácticas, como la del inicio, que muestra la proporción de cada caloría producida que termina como alimento humano. Aquí hay otra estadística, que indica cuál parte de las calorías de algunos de los principales cultivos realmente se convierte en alimento humano:

La proporción de calorías de varios cultivos que se convierten en alimento humano.
En verde están las calorías comestibles, y en rojo las pérdidas debido a conversión a carne u otros usos (biodiesel, etc.)


Cassidy, E. S., P. C. West, J. S. Gerber, and J. A. Foley. 2013. Redefining agricultural yields: from tonnes to people nourished per hectare. Environmental Research Letters 8:034015.

González-Amaro, R. M., A. Martínez-Bernal, F. Basurto-Peña, and H. Vibrans. 2009. Crop and non-crop productivity in a traditional maize agroecosystem of the highland of Mexico. Journal of Ethnobiology and Ethnomedicine 5:38.

miércoles, 20 de enero de 2016

El Museo Nacional de Agricultura de la Universidad Autónoma Chapingo

Vivo en el municipio de Texcoco, muy cerca de la Universidad Autónoma Chapingo, y en ocasiones paso frente al edifico de Rectoría, que esta catalogado por el INAH y el INBA como monumento histórico y artístico, reconocido además como patrimonio cultural de la nación. En la foto de abajo ya podrán ver por que. Además de hermoso, el edificio alberga al Museo Nacional de Agricultura  que recientemente fue remodelado, así que decidí entrar para ver como quedo.


Museo Nacional de Agricultura. Foto de Luigi Guarino, via Wikipedia.
El concepto del museo es ilustrar distintas etapas de la agricultura en México mediante una colección de herramientas agrícolas, murales y artesanías.

Maíz/Identidad/Cultura- Mural de Alfredo Nieto Martínez 
La primera sala del museo está dedicada a la agricultura prehispánica en la cual uno de los aspectos más notables es el cultivo de alimentos en chinampas. El sistema de las chinampas consistía en cultivar sobre camellones de figura oblonga. Sobre las orillas de las chinampas se sembraban sauces (Salix bonplandiana), cuyas raíces son largas, hecho que aprovechaban los indígenas para tejerlas y sostenerlas con troncos, formando un entramado a manera de cesto que protegía las orillas de los camellones.

Maqueta de chinampas., elaborada por Miguel Ángel Martínez
Maqueta "La conquista".
Algunos utensilios y herramientas  relacionados con esta etapa histórica de la agricultura son: coas, palos plantadores, sembradores, y piscadores.

Sembradores: recipientes para transportar las semillas durante la siembra.

Coas y palo sembradores.
En la segunda sala se exhiben herramientas pertenecientes a la época colonial, pues los españoles iniciaron la introducción de nuevas especies cultivables, la tracción animal con bueyes, mulas y caballos, además de herramientas de acero y otros metales, y diferentes técnicas de cultivo.

Alambique para destilación. Técnica de origen árabe. 
Acocote, utilizado para extraer el agua miel por succión.
La tercera sala está dedicada casi exclusivamente a la cultura generada en torno al cultivo del agave y la obtención del pulque, bebida alcohólica tradicional de México que se elabora a partir de la fermentación del “aguamiel”  del  maguey pulquero (Agave salmiana).

Lo que Mesoamérica aportó y lo que a ella llegó. Mural de Ventura Cervantes Argueta.

Una de las salas más bonitas es la exhibición de utensilios elaborados a partir de fibras vegetales. Los objetos tejidos a partir de fibras vegetales fueron particularmente importantes en dos labores agrícolas: en la siembra, como depósito de semillas o en la cosecha.  No menos importantes son las barcinas, que se colocan en la trompa de los toros durante la labranza; las hondas para ahuyentar o cazar aves, así como la elaboración de cuerdas, cinturones y artesanías.

Coyunda tejida con ixtle, esta pieza se usa para uncir una yunta de bueyes.

Artesanía elaborada a partir de hojas de palma.
Finalmente, la sala que más me gusto es la dedicada a los personajes históricos, donde te puedes encontrar las representaciones de aquellos que jugaron un papel importante en la historia de México.

Personajes históricos
¿Adivinas quien es este famosisimo muralista?
El museo está ubicado en el kilómetro 38.5 de la carretera México - Texcoco. Chapingo, Estado de México. El horario de visita es de lunes a viernes de 9:00 a 15:00 horas, sábado y domingo de 10:00 a 17:00 horas. Puedes pedir informes a este número telefónico que pertenece a la Universidad Autónoma Chapingo: Tel (595)9521500.

Entrada al Munseo Nacional de Agricultura.
Así que ya sabes, puedes aprovechar de forma integral tu visita a la Universidad Autónoma Chapingo, asistiendo a los eventos culturales que ofrece en cartelera, visitando el Museo de Agricultura y la  Capilla Riveriana,que contiene varios murales de Diego Rivera y se encuentra a un lado del Museo.
Vista de la Calzada de los Agronomos Ilustres. Entrada de la Universidad Autónoma Chapingo.

martes, 19 de enero de 2016

La Fiesta del Maíz de Ixtenco, 2016

Actualización del 23 de febrero de 2016.
Aquí está el cartel más reciente:


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Ya salió el anuncio para la Fiesta del Maíz, Ixtenco, Tlaxcala, 2016. Se llevará a cabo el fin de semana antes de Semana Santa, como ya desde hace varios años. Esto es el 19 y 20 de marzo de 2016. Pueden ver cómo es en este reportaje fotográfico de la fiesta en 2013.



lunes, 18 de enero de 2016

Tierrita...para mi tierra.

Hace unos 4 años allá por el mes de Noviembre, estando en el Distrito Federal me devoraban las ganas de comerme unos sabrosos elotes asados y otros hervidos, quería entrarle con ganas a los riquísimos tlaxcales, que mi mamá hacía a mano, y atragantarme con los tamales de elote que mi abuelita preparaba con tanto esmero al verme llegar. El recuerdo del sabor dulce de aquel maíz que mi abuelito cultivaba detrás de su casita allá en una loma de la ilustre ciudad de Iguala, Guerrero, me aconsejó regresar de inmediato para degustar de ese festín.

Milpa guerrerense (Foto: H. Vibrans)
Pero ¿Qué fue lo que encontré al llegar a la casa de mis abuelos? La respuesta era simple, simple y aterradora, NADA, no encontré nada, no encontré las altas matas de maíz adornando las lomas que siempre fueron verdes, no encontré a mi abuelo dando tierra a esas matitas de resiembra, ni a mi abuela al lado del fogón asando elotes, no encontré NADA. No podía entenderlo así que fue corriendo a buscar alguien que pudiera explicarlo.

Me encontré un pequeño terreno lleno de milpa, donde un joven recorría los surcos tirando una especie de “tierra” al pie de cada mata, y después la tapaba con el pie. La curiosidad me ganó así que me atreví a preguntar: -Buen día ¿Qué estás haciendo? - A lo que el joven me contestó -Estoy sembrando tierra- y soltó una carcajada. Y en eso recordé un trabajo que había hecho hacía algún tiempo, decía más o menos así (Figura 1)...


Figura 1. Portada de tesis

Muchos agricultores mexicanos no usan los fertilizantes químicos para sus siembras. Esto se debe principalmente a su alto costo (Figura 2), además algunos saben que el uso excesivo de productos químicos ha deteriorado el medio ambiente y los suelos. La contaminación por fertilizantes se produce cuando éstos se utilizan en mayor cantidad de la que pueden absorber los cultivos.

Figura 2. Componentes del costo de producción



Solucionar ese  problema no ha sido fácil, por que se buscan beneficios para los agricultores y se procura evitar la contaminación ambiental. Los investigadores han propuesto los biofertilizantes, estas sustancias están hechas con hongos y bacterias microscopicos.

Estos microorganismos se pegan en la raíces de las plantas y absorben su savia nutritiva y en recompensa los microorganismos descomponen las partículas nutritivas grandes que las plantas no pueden absorber en partículas pequeñas que pueden ser absorbidas fácilmente.  De esta forma hay un mejor aprovechamiento de nutrientes y una mejor retención de agua lo cual promueve el buen desarrollo de los cultivos.


Algunos de estos biofertilizants contienen hongos como Glomus intraradices Schenck & Smith, Trichoderma spp. y la bacteria Azospirillum brasilense Tarrand et al., como fuente de nutrición para los cultivos.

Estos organismos vienen incluidos en paquetes que el gobierno otorga a los campesinos como parte de algunos programas gubernamentales. Pero los agricultores por falta de conocimiento le llaman a éste producto "tierra", más no saben que es lo mejor que hay para los cultivos. Veremos de que se trata exactamente.


Los microorganismos benéficos

Azospirillum brasilense Tarrand et al.

Son bacterias que se relacionan con las raíces de muchas plantas, esta asociación genera una reducción en 40-50% el nivel de los fertilizantes químicos empleados normalmente, además de reducir costos, contaminación ambiental y asegurar la salud humana (Abril et al., 2006).

Se ha mostrado que A. brasilense se adhiere a las raíces de plantas como el maíz, esto permite reducir hasta en 50% el uso de los fertilizantes químicos (nitrógeno, fósforo y potasio) sin que disminuya el rendimiento del cultivo (Caballero-Mellado, 2010).

Glomus intraradices Schenck & Smith

El hongo G. intraradices (Figura 4) también reduce del uso de fertilizantes, el uso de productos fitosanitarios, ayuda a ahorrar agua, y hace que las plantas tengas un mayor crecimiento y se puedan obtener mejores cosechas, además les ofrece a las plantas una mayor resistencia a las condiciones de sequía y mejora el aprovechamiento de nutrientes naturales que se encuentran en los suelos (Hernández, 2008).

Glomus intraradices (Fuente: Agriculture and Agri-Food Canada)


Trichoderma spp.

Estos hongos (Figura 5) habitan en casi todos los suelos, sobre todo en aquellos que contienen mucha hoja seca, o residuos de estiércol de animales y residuos de cultivos, sobre todo aquellas que son más sensibles a enfermedades por hongos.

Además ayudan al control de enfermedades de plantas, descomponen materia orgánica y hacen que los nutrientes se conviertan en formas disponibles para la planta. Es por eso que se menciona que son muy importantes para la nutrición del cultivo (Jensen y Wolffhechel, 1995).


Trichoderma harzianum (Fuente: Wikipedia)


Mis experimentos

Para mi tesis llevé a cabo varios experimentos con el fin de cuantificar el rendimiento bajo diferentes dosis de fertilización química y con biofertilizantes, así como evaluar la rentabilidad de los tratamientos.

Se hicieron en condiciones de riego de enero a mayo de 2013, en el campo experimental del Centro de Estudios Profesionales (CEP) del Colegio Superior Agropecuario del Estado de Guerrero, donde estudié. El genotipo de maíz utilizado fue VS-535, con un rendimiento de 6 a 7 t por hectárea.

Los tratamientos empleados fueron nueve y se muestran en el Cuadro 1. Estos se distribuyeron en el campo mediante un diseño experimental de bloques completos al azar, con cuatro repeticiones, generándose así, 36 unidades experimentales.

Cuadro 1. Tratamientos evaluados en el experimento

Se sembró a mano el día 11 de enero de 2013, poniendo tres semillas por mata a una distancia de 41 cm del surco. Se fertilizó deacuerdo a los tratamientos. Para poder evaluar los tratamientos se midió el rendimiento de grano.

Resultados


La mayor cosecha de maíz se obtuvo con los tratamientos en donde se aplicó 100% de fertilizante químico (T9), en este tratamiento se obtuvieron 6308 kg en una hectárea (en la Figura 6 este valor es representado por la barra de color verde) .

De la misma manera se obtuvo una buena cosecha en el tratamiento en  donde se hizo una mezcla de 50% de fertilizante químico + 50% de  biofertilizante (T8): se obtuvieron 5614 en una hectárea (en la Figura 6 este valor se representa con la barra de color azul).

Con estos resultados podemos decir que aplicando la mitad de fertilizante químico y la mitad de biofertilizante obtenemos una muy  buena cosecha casi similar a la que se obtendría con una fertilización 100% química sin que el productor afecte su economía.

Figura 6. Valores medios de rendimiento de grano en maíz VS-535

¿Qué significa esto en pesos?

En la Figura 7, se hace una comparación de lo que costaría utilizar diferentes formas de fertilización y producción de maíz. Quiero aclarar que en Iguala, Guerrero, donde viven mis abuelitos los terrenos para sembrar se ha reducido en gran medida por la urbanización que se está extendiendo rápidamente hacía los terrenos fértiles.

Es por eso que los análisis económicos de todos los tratamientos se hicieron tomando en cuenta que sería una siembra en terreno rentado ($1200), y como los terrenos que aún se utilizan para la siembra son planicies se utilizan maquinaria para labores de cultivo como barbecho, rastreo, surcado y siembra ($850 cada labor).

Antes estas actividades se realizaban a mano por los integrantes de la familia, pero ahora a los jóvenes ya no les gusta trabajar en el campo, así que buscan empleos en las ciudades. Además también se tomó en cuenta el manejo fitosanitario y sus respectivos jornales, es por eso que el costo de producir incrementa enormemente.

De esta manera podemos ver como el tratamiento 1 (Testigo absoluto) que se representa con una barra roja en la Figura 7 tiene un valor negativo de $-0.48 pesos, es decir que por cada peso que yo invierto en un cultivo de maíz con 0% de fertilización yo pierdo casi 50 centavos.

Y en contraste el tratamiento 8 (50% fertilización química+50% biofertilizante) representada con una barra de color verde oscuro tiene un valor de $1.47, esto significa que por cada peso que yo invierto en un cultivo con esta fertilización estoy ganando casi 2 pesos.


Figura 7. Ganancia por peso invertido por cada tratamiento evaluado

Al recordar ese experimento fui en busca de mi abuelo para contarle mi experiencia con los biofertilizantes y tratarlo de convencer que hay ideas que de verdad funcionan solo es cuestión de ponerles un poco de empeño.

Al principio no tuve muy buenos resultando tratando de convencerlo, pero después me propuso un trato...sí yo lo ayuda a sembrar el próximo año él me dejaría ponerle toda la tierrita (biofertilizante) que yo quisiera al maíz y que si de verdad funcionaba y obteníamos buena cosecha, él mismo me asaría un costal de elotes para mi solita. Y por supuesto que acepté el trato...amo los elotes asados!!!!

Le conté a mi familia del trato que habíamos hecho y después todos querían elotes...así que nos fuimos a sembrar un terreno de 2 hectáreas de maíz. Ese año mi abuelo obtuvo 16 toneladas de maíz y yo...bueno...yo comí muchos elotes!!!


Literatura citada


Abril, A., Biasutti, C., Maich, R., Dubbini, L. y Noe, L. 2006. Inoculación con Azospirillum spp., en la región semiárida-central de Argentina: Factores que afectan la colonización rizosférica. Ciencia del Suelo 24(1): 11-19.

Bueno, H. P. 2009. Efectividad de los biofertilizantes (Glomus intraradices Schenck & Smith y Azospirillum brasilense Tarran et al.) en comparación con la fertilización química en maíz. Tesis de licenciatura. Centro de Estudios Profesionales. Colegio Superior Agropecuario del Estado de Guerrero. Cocula, Gro. pp. 8-11,28-41

Caballero-Mellado, J., J. Onofre-Lemus, A. Wong-Villarreal, R. Castro-González, P. Estrada-de los Santos, J. Rodríguez-Salazar, R. Suárez, G. Iturriaga y L. Martínez-Aguilar. 2009. Uso de Azospirillum en México como biofertilizante y potencial de nuevas especies bacterianas como biofertilizantes, agentes de biorremediación y biocontrol de fitopatógenos. XIII Congreso Nacional de Biotecnología y Bioingeniería, Acapulco, Guerrero.

Fairchild, A. 2008. Azospirillum brasilense. Página Web. (Fecha de consulta 22/06/13).

Hernández D., A. 2008. Las micorrizas. Revista Terralia 4 (14):12-18.

Jensen, D. F. y H. Wolffhechel. 1995. The use of fungi, particulary Trichoderma spp. and Gliocladium spp., to control root and damping off diseases. En H. M. T. Hokkanen y J. M. Lynch. Biological control: benefits and risk. Cambridge University Press, Cambridge, UK. pp. 177-189.

Schenck, N. C., Y. Pérez, 1990. Manual for the identification of VA mycorrhizal fungi. 3th Edition. Synergistic Publications. Gainsville.